Lipolaser

Aparatología lipolaser frio.  Una cantidad de 60 lodos abordan la superficie de la piel a trabajar, los haces rojos de laser frio o atérmico son absorvidos por la piel, llegando a un nivel de profundidad de 635 a 680 nm (hipodermis superficial) causando una reacción fotoquímicas y fotobiológicas en el tejido adiposo, que son las responsables de disminuir la célula grasa.

¿Cómo se supo que el lipolaser frio tenía efectos en el tejido adiposo?

Muchos sabemos que las células dañadas emiten una respuesta fisiológica mucho más rápida que promueve la regeneración, se repara el tejido, disminuyen dolores e inflamación, fue en este tipo de proceso o terapia de laser frio donde los médicos se dieron cuenta que al nivel de profundidad que ingresan los haces rojos se producía, además, una licuefacción del adiposito, es decir, se degrada el triglicerido en moléculas de ácidos grasos y glicerol, manteniendo vivo al adiposito, reduciendo notablemente su tamaño, es por ello que se vuelve una alternativa más para remodelar nuestro cuerpo, sin alterar funciones biológicas y fisiológicas, lo que lo vuelve un tratamiento 100% seguro para los pacientes.

• El tratamiento arroja resultados desde la primera sesión, pero su eficiencia radica en el sistema de uso continuo (1 vez por semana durante un mínimo de 1 mes), los resultados son progresivos y acumulativos. 

• El promedio de perdida en centímetros en la zona abdominal por sesión puede estar entre 0.5 cm y 1.5 cm, con una eficacia del 97.4%.

Resultados de un tratamiento de 3 o 4 semanas de duración brinda en promedio una pérdida de 4 a 6 cm en el perímetro abdominal, pudiendo continuar con el tratamiento durante las semanas que sea necesario sin necesidad de realizar pausas.